¿Hay algo más reconfortante que una rosca casera rellena de jamón y queso, recién salida del horno, con esa costra doradita y el queso derretido que se estira cuando la partís? Este pan salado es una opción perfecta para compartir, y además es muy fácil de preparar en casa con ingredientes que seguro ya tenés.
Te comparto una receta casera, esponjosa y rendidora, ideal para reuniones familiares, picadas con amigos o incluso para llevar al trabajo. También se puede congelar o recalentar, ¡así que hacé una grande y disfrutala varios días!

Ingredientes
Para la masa:
- 500 g de harina de trigo común
- 1 cucharadita de sal
- 2 cucharadas de azúcar
- 1 sobre de levadura seca (7 g)
- 250 ml de leche tibia
- 1 huevo
- 50 g de mantequilla derretida
Para el relleno:
- 300 g de jamón cocido (en láminas o picado)
- 200 g de queso mozzarella o queso que derrita bien (puede ser gouda, fontina, etc.)
- Orégano o albahaca seca al gusto
Para decorar:
- 1 yema de huevo con un chorrito de leche (para pincelar)
- Semillas de sésamo o amapola (opcional)
Paso a paso para preparar la Rosca de Jamón y Queso
1. Activar la levadura
En un bowl pequeño, mezclá la leche tibia con el azúcar y la levadura seca. Dejá reposar por 10 minutos hasta que espume. Eso indica que la levadura está activa.
Importante: La leche no debe estar muy caliente, porque mata la levadura. Solo tibia, como para un biberón.
2. Preparar la masa
En un bowl grande, colocá la harina y la sal. Hacé un hueco en el centro y añadí el huevo, la mantequilla derretida y la mezcla de levadura.
Comenzá a mezclar con una cuchara o con las manos hasta formar una masa. Amasá durante unos 10 minutos, hasta que esté suave, elástica y no se pegue tanto a las manos.
Tip de textura: Si ves que está muy pegajosa, agregá un poquito más de harina. Si está muy seca, un chorrito más de leche.
3. Dejar levar
Formá una bola con la masa, colocala en un bowl aceitado y tapá con un paño limpio. Dejá levar por 1 hora en un lugar cálido, hasta que doble su tamaño.
4. Estirar y rellenar
Una vez levada, desgasificá la masa (amasala suavemente para sacar el aire) y estirala en forma de rectángulo.
Cubrí con las fetas de jamón y queso de forma pareja. Espolvoreá orégano o albahaca por encima para darle más sabor.
Tip extra: También podés agregar unas aceitunas picadas, tomate seco o cebolla caramelizada si querés una versión gourmet.
5. Formar la rosca
Enrollá el rectángulo como si fuera un pionono. Luego uní las puntas formando una rosca y colocala en una fuente para horno con papel manteca.
Hacé unos cortes superficiales en la superficie (como una estrella) para que el relleno se vea un poco. Tapá y dejá levar otra vez por 20-30 minutos.
6. Pincelar y hornear
Pincelá con la mezcla de yema y leche para que se dore bien. Espolvoreá con semillas si querés.
Llevá al horno precalentado a 180 °C (350 °F) por unos 25–30 minutos, o hasta que esté bien doradita.
Consejos para que te quede perfecta
- Usá un buen queso que derrita bien, pero que no pierda todo su sabor. Evitá quesos muy líquidos que mojen la masa.
- Si querés que sea más liviana, podés usar jamón de pechuga de pavo.
- Congelá la rosca ya horneada y calentala unos minutos en el horno antes de servir. Queda como recién hecha.
- Si no tenés molde redondo, hacé un pan alargado o cortá en porciones individuales antes de hornear.
¿Por qué todos aman esta receta?
- Es esponjosa por dentro y crocante por fuera.
- El relleno se puede variar al gusto (pollo, vegetales, salame, queso azul…).
- Se hace con ingredientes simples y económicos.
- Es ideal para preparar con anticipación y servir caliente o fría.
¿Con qué acompañarla?
- Una ensalada fresca (rúcula, tomate cherry y parmesano va perfecto).
- Un chimichurri casero o una salsita de ajo y perejil para untar.
- Una copa de vino tinto o una limonada bien fría si es para almuerzo o picada.
Cómo conservarla
Podés guardarla en la heladera por 3–4 días, bien tapada. Para recalentar, llevála unos minutos al horno o a la sandwichera para que quede como recién hecha.
En resumen
La Rosca de Jamón y Queso es ese tipo de receta que nunca falla. Ideal para cualquier ocasión, con ingredientes sencillos, económica, rendidora y deliciosa. Perfecta para cocinar en casa, compartir, congelar y disfrutar a cualquier hora.