Si buscas un bizcocho diferente, con una textura ligera y un sabor que combina lo esponjoso con un toque crujiente, este bizcocho de almendras es justo lo que necesitas. Con un suave aroma a limón y una irresistible cobertura de almendras tostadas, es perfecto para el desayuno, la merienda o cualquier momento en que quieras darte un capricho.
Porciones: 8 a 10
Tiempo de preparación: 15 minutos
Tiempo de cocción: 45 minutos
Categoría: Panes y bollos
Ingredientes
3 huevos
200 g de harina de trigo
12 g de levadura química (polvo de hornear)
100 g de almendra molida
300 g de azúcar
160 ml de leche entera
120 ml de aceite de girasol
Ralladura de 1 limón
80 g de almendras laminadas (para la cobertura)
Preparación paso a paso
- Precalienta el horno a 180°C y engrasa un molde (rectangular o redondo) con mantequilla y un poco de harina.
- Bate los huevos con el azúcar en un bol grande hasta obtener una mezcla espumosa y clara.
- Añade la leche, el aceite de girasol y la ralladura de limón. Mezcla bien hasta que todo quede integrado.
- Tamiza la harina junto con la levadura y añádelas a la mezcla anterior con movimientos envolventes. Esto ayudará a mantener la masa aireada.
- Incorpora la almendra molida y mezcla hasta que la masa sea homogénea.
- Vierte la mezcla en el molde y espolvorea las almendras laminadas por encima.
- Hornea durante 40 a 45 minutos. Para saber si está listo, introduce un palillo en el centro: si sale limpio, ¡ya lo tienes! Si ves que las almendras se doran muy rápido, cúbrelo con papel de aluminio los últimos minutos.
- Deja enfriar el bizcocho en el molde unos 10 minutos antes de desmoldarlo. Luego pásalo a una rejilla para que se enfríe completamente.